Hasta 2017, escribía para mí.
Entre 2017 y 2018 me tomé un año sabático durante el cual me dediqué a aprender. Hice varios cursos gratuitos y de pago. Empecé a tomármelo más en serio, porque si yo no me tomo en serio como escritor, ¿cómo me van a tomar los demás?
El primer paso para ser escritor, desde mi modesta opinión, es ese: creértelo.
Desde que me lo tomo en serio, presento regularmente mis escritos a editoriales y concursos, y, sinceramente, no suelo obtener grandes resultados. Pero alguna vez sí ha sonado mi flauta: